Nuevo León, ITESM / ciberpasquinero
El peso psicológico de vivir una agenda de aislamiento tan estricta a largo plazo, no solamente afecta a los adultos, los niños son especialmente vulnerables en una situación de cuarentena como la que vivimos ahora.
En casa, las familias con opción a trabajar a distancia, deben equilibrar sus obligaciones laborales con el trabajo que es necesario hacer en casa, y ayudar a sus hijos con las asignaciones escolares.
Lo anterior ha probado ser una carga muy pesada para las familias con menores de edad en nivel de educación básica.
Para las familias que toman la decisión de retirar a sus hijos de la escuela debido a la cuarentena, la mayor inquietud es que los niños puedan retrasarse en comparación con otros.
Jon E. Pedersen, decano de la Escuela de Educación de la Universidad de Carolina del Sur, explicó que el retraso comparativo no sería mucho, dado que son muchos los niños que están en la misma situación, ya sea que sus padres los hayan retirado de la escuela en línea o que tengan problemas para adaptarse a este modelo. “[...] no van a estar solos, la mayoría de las escuelas en el año siguiente tendrán que lidiar con lo que se perdió durante la crisis.
Los aspectos académicos se pueden recuperar.
Podemos superar esto”, comentó el decano.

No hay comentarios:
Publicar un comentario